Evolución en el deporte del tiro al plato
Cuentan los más veteranos que en Montes Blancos, Zaragoza, eran comunes las tiradas de 300 y 400 escopetas. Que se hacían colas de más de 60 minutos para tirar una serie…
…en la actualidad, las tiradas más numerosas alcanzan los 150 / 175 tiradores. Durante muchos fines de semana, las canchas españolas se encuentran casi vacías, incluso en los días que el sol se pone a eso de las 22.00h.
Ya son siete años implicado en el mundo del tiro. Al principio por profesión y ahora también por afición, visito numerosos campos de tiro, nacionales e internacionales, “de pueblo” y “de renombre”, de foso y de recorridos, concebidos como club o como negocio.
En todos ellos se observa un denominador común acerca de la situación actual del deporte. En resumidas palabras, “el deporte de tiro al plato se encuentra en un círculo vicioso de continua depresión”. Ese deporte “glorioso” de los años 80 y 90 se encuentra actualmente en caída libre. El tiro al plato español vive de los recuerdos del pasado.
Existen diversas razones por las que el deporte de tiro al plato dispone de una tendencia decreciente
Aunque todos los agentes que formamos parte de la “fiesta del tiro” podríamos inculparnos unos a otros de la actual situación del deporte en España, con los dedos de una mano podrían resumirse las razones de la actual situación, en particular,
- Reducida entrada de jóvenes deportistas durante los últimos años, en consecuencia, la población de tiradores actual se ha visto ligeramente envejecida. El futuro, a día de hoy, no es más prometedor, el tiro al plato no se encuentra en el “top” de los deportes más deseados por parte de nuestros jóvenes.
- Mala imagen de la que gozan las armas y sus deportes asociados, sin que ninguno de los agentes que estamos implicados en el sector hayamos actuado para mejorar nuestro posicionamiento ante la sociedad.
- Crisis económica reinante en el país, como consecuencia, se ha producido el abandono de la escopeta por parte de numerosos tiradores. Escopeta “que se abandona”, licencia que se pierde… en resumen, tirador que difícilmente vuelve a las canchas.
- Constante cierre de campos de tiro en territorio nacional, por diversas razones:
- El modelo de gestión de un elevado porcentaje de campos de tiro es “amateur”. Muy a menudo, el gestor del campo actúa de manera voluntaria, la cancha es parte de su tiempo de ocio. La cancha es su entretenimiento. Estos campos, gestionados en base al tiempo libre de algunas personas, continuamente van desapareciendo en la medida que el gestor decide “jubilarse”.
- Por otro lado, el incumplimiento de algunos de los requisitos legales exigidos a los campos de tiro o bien la presión social del entorno es otra de las razones por las que los campos “echan el cerrojo”.
- Un sector / deporte mínimamente vertebrado, en alguna situación dividido. Bien dice el dicho “a perro flaco todo son pulgas”. El sector, tanto a nivel deportivo, como empresarial y federativo se encuentra disperso y sin orientación estratégica de futuro… por lo que se genera un coctel que continua realimentando así mismo la “desconfiguración” del deporte de tiro al plato.
Reconozcámoslo, el mundo del tiro al plato se caracteriza por una situación decadente.
De cara al futuro, en el deporte de tiro al plato podrían identificarse dos alternativas de evolución.
En este contexto y vislumbrando el futuro, podríamos dibujar dos posibles escenarios para el tiro.
- Un escenario “de Status Quo”, ¡¡¡continuemos como estamos!!! ¡¡¡No hagamos nada!!!
Y entonces, ¿qué podría suceder?
Aunque sea jugar a futuristas, se intuye…
- Que el deporte permanecería en España de manera residual, con una población tiradora verdaderamente envejecida. En el peor de los casos, no descartaría que el tiro al plato podría llegar a desaparecer de nuestro país.
- Muchos de los campos de tiro “de pueblo” y las tiradas eventuales (recordemos que ambas son la cuna de este deporte) desaparecerían por completo. Posiblemente en España solo querían 3 / 4 campos de tiro “grandes” que poco a poco tendrían que buscarse actividades e ingresos alternativos al tiro al plato. Es posible que el tiro no les diera para subsistir.
- Considerando la industria asociada, (escopeteros, cartucheros, plateros, campos de tiro, hostelería asociada, medios de comunicación, armeros, distribuidores, …) poco a poco irán desapareciendo y consecuentemente perdiéndose el impacto económico (tanto a nacional como internacional) asociado a esta industria.
- Las industrias que logren subsistir, se “pegarían” por un trozo de la tarta cada vez más pequeño, más mermado. Tanto fabricantes como armeros y distribuidores, “se comerían los ojos los unos a los otros”, competirían vía precio y la innovación sería inexistente en el sector.
- Lógicamente, la progresiva desaparición del deporte y sus disciplinas deportivas producirá una progresiva merma / desaparición de instituciones federativas / agentes similares.
En resumen, aunque este diagnóstico futurista se cumpliera exclusivamente en un 25%, el “status quo” no es admisible. Sería la perdición.
De no hacer nada, se vislumbra un futuro “negro” en el que, a medio plazo, el deporte de tiro al plato (y todo lo que le rodea) será parte de los libros de historia. De igual manera que hoy lo son los deportes de los romanos.
- Por el contrario, podría asumirse la situación actual y construir entre todos los agentes implicados un futuro para el deporte de tiro al plato.
Es simplemente una necesidad de supervivencia, una ilusión por mejorar. Es necesario tomar medidas para minimizar la actual “crisis estructural” en la que se encuentra enclavado nuestro deporte.
Todos los agentes que forman parte de este “circo” comprueban la necesidad de cambio, además, algunos observan los nichos de oportunidad que, actualmente, el tiro al plato está ofreciendo.
Y es así cómo movidos tanto por la responsabilidad del momento como por la oportunidad de mejora que ofrece el deporte, fabricantes, distribuidores, técnicos deportivos, clubes, medios de comunicación, deberíamos trabajar de manera conjunta para “reimpulsar” el sector que “nos da de comer”.
Propongo la creación de un “grupo de trabajo participativo para la promoción y fomento del tiro al plato”. Un colectivo que despliegue actuaciones que reimpulsen el mundo de tiro con escopeta.
Una asociación de empresas que realice un acercamiento al mundo del tiro diferente al actual, generando, por un lado, una alternativa de ocio para el tirador y su entorno, en la que el tiro al plato sea el eje vertebrador y por otro lado, impacto económico positivo para las industrias que dependen de este deporte.
No se trataría de sustituir ni de fagocitar a cualquiera de las instituciones ya existentes (asociaciones empresariales, federaciones, sociedades de cazadores, etc.), sino de dar respuesta conjunta e integral a las debilidades y oportunidades que el “plato” nos está brindando.
Podríamos construir un proyecto colaborativo en el que tenga cabida cualquier agente con ilusión por construir un futuro mejor. En el futuro, el éxito del tiro al plato, en cualquiera de sus modalidades, radica en la convergencia e interacción, en un mismo espacio y tiempo, de ideas y perfiles diversos; tanto del mundo de la industria como de los deportistas, las federaciones, las administraciones públicas, los clubes y los campos de tiro.
Se trataría de construir una institución con la necesidad de trabajar “por y para” todas las disciplinas de tiro al plato (con especial énfasis en las más populares), de manera colaborativa con todos los estamentos y buscando la autofinanciación de su actividad.
Es así de sencillo, intentemos entre todos los agentes que forman parte del tiro al plato favorecer su impulso para alcanzar cotas de desarrollo del deporte, al menos, similares a las alcanzadas en los años 80 y 90. Es nuestro deber y nuestra ambición.
PROPUESTA DE ACCIONES DE MEJORA
Para avanzar en este sentido consideramos que deben ponerse en marcha una serie de acciones de mejora basadas en las siguientes líneas de actuación:
- Crear planes para seducir a los noveles y conseguir que se incorporen a este deporte.
- Crear un circuito amateur independiente de las Federaciones, pero consensuado en el calendario nacional e internacional.
- Mejorar las instalaciones y convertirlas en clubes sociales con el Tiro como hilo conductor.
- Complementariamente, estructurar el sector / agrupación de los agentes integrantes favoreciendo la defensa de sus intereses.
- Actividades innovadoras favorecedoras del deporte.
Los ámbitos principales en los que centrar esas mejoras serían:
- Apertura del deporte y formación en disciplinas de tiro. Asesorando y reduciendo las gestiones para iniciarse en este deporte, realizando campañas de comunicación y creando escuelas de tiro.
- Entretenimiento y práctica deportiva para todas las categorías. Creando planes de entrenamiento grupales, campeonatos distintos a los existentes, recuperando la tirada de pueblo o creando comunidades virtuales de tiradores.
- Desarrollo de infraestructuras y oferta deportiva actual. Prestando asesoría legal para campos de tiro, mejorando el modelo de gestión de las instalaciones, mejorando las infraestructuras y estableciendo un modelo de intercambio de interclubs nacional e internacional, incorporando, para ello, agentes complementarios como agencias de viaje y catering.